¿Quien no ha hecho en la escuela una manualidad a base de legumbres? o ¿a que padre/madre no le ha tocado ayudar a sus hijos a hacerlas durante la época del colegio?
Estas son el tipo de cosas que pasados unos añitos (en mi caso del orden de 17) va siendo hora de que uno se replantee para que narices se guardan. Al principio puede ser por amor propio, luego por nostalgia, pero llega el momento en que toca plantearse si tiene sentido guardarlo.
La decisión es sencilla, como legado a la posteridad solo quedará esta foto, porque el collage ya ha pasado a mejor vida. Y vosotros, ¿que hacéis con este tipo de “recuerdos”?
9 replies on “Chiquilladas”
Todo lo que no sea útil, ¡a cascala!. Aunque por esa definición debería tirarme a mi mismo… interesante.
@blaxter, si dependiera de mi no lo tiraría, pero siendo el espacio algo finito y limitado, pues hay que hacer sitio para poder guardar otras cosas 😛
Yo hacía muchos trabajos manuales. En el colegio, a final de curso, se hacía una macroexposición con los que habían ido seleccionando durante todo el curso. Mi hermano y yo disfrutábamos como enanos, destruyendo a martillazos lo que nos devolvían tras ella. Tantas horas de trabajo tenían esta pequeña recompensa, hacerlas efímeras. El objetivo estaba cumplido, las habilidades desarrolladas, la creatividad cansada. Así que guardar tanta cosa era imposible en un pisito modesto.
Gracias a aquellos trabajos manuales aprendí a serrar, encolar, pintar, atornillar… Ahora soy un decente bricolajero, y lo que hago tiene utilidad práctica, y una vida prolongada.
Yo también hice una manualidad parecida a la tuya, pero con lentejitas. Recuerdo que hice un dinosaurio, pero no me dejaban copiarlo de ningún lado, tenía que hacerlo yo a mano alzada y después pintar las lentejitas de distintos colores.
@carlos, vaya, casi tienes espíritu fallero, ya que con el trabajo y esfuerzo que te costaron hacerlas, disfrutaste destruyéndolas 😛
Yo lo del bricolaje lo he aprendido por otra parte, pero me ha servido para hacer manualidades más decentes (o eso creo).
@Judith, pues si que tiene merito. Yo el mío lo calqué de una fotocopia de un libro del rey león, pero es que no nos obligaban a que fuese original.
@sucotronic, además de eso sabes de fontanería… jeje.
Y lo de fallero igual es un poco de verdad, sólo me falta hacer que ardan algunas miserias que arrastro, pero pronto es san Juan y ¡ya veremos!. 😉
A mí me hubiera dolido tirarlo la verdad, siempre será un recuerdo que aunque sea un trasto te traerá recuerdos del pasado, pero quizás hayas hecho bien, depende de cada uno decidir si tirarlo o no. Yo particularmente no recuerdo haber hecho algo parecido, aunque sí algo con palillos, pero no con legumbres. Por cierto, te quedó muy chulo. Saludos.
@Miguel Daza, ahora ya no tiene vuelta atrás 😛
yo de palillos hice una especie de “cestita” que aún conservo para guardar cacharros dentro de ella.